El Barcelona comenzó la temporada como uno de los mejores equipos del momento en la élite del fútbol mundial. El conjunto culé, renovado desde la llegada de Hans-Dieter Flick al banco del azulgrana, transita un andar arrollador: líder de la Liga con nueve puntos de ventaja, aunque el Real debe un partido, en puestos de clasificación a octavos en Champions League y con solo dos derrotas y 14 victorias en lo que va del semestre (54 goles a favor). Pero lo más valioso para el elenco catalán es que con el DT alemán se revalorizó la inexorable Masía.
Es que en este equipo que fluye y no para de ganar son fundamentales los jóvenes. Es cierto que su antecesor, Xavi Hernández, leyenda del club y forjado en las juveniles, le dio lugar en Primera a algunos chicos y bajo su mando se asentaron Lamine Yamal, la gran estrella del fútbol español campeón de la Eurocopa, Pau Cubarsí y hasta Gavi, el DT llegó a ser crítico. «Es extraño que haya jugadores del Barça que no entiendan el juego de posición», dijo en 2021 poco después de asumir. Incluso la prensa española consignó que ese fue uno de los motivos de su salida a mitad de año.
No obstante, con el arribo del alemán la historia cambió. Flick llegó con un gran conocimiento de las juveniles que sorprendió hasta a los propios directivos. En estas pocas semanas se ha presentado en varias ocasiones en los entrenamientos del conjunto filial y partidos del Juvenil A. Está muy encima de las categorías menores. «Hay mucha calidad en la cantera. Es muy buena noticia tenerlos a ambos entre nosotros. No he tenido dudas para convocarlos», supo declarar el entrenador bávaro.
Una de las principales muestras de esta apuesta está en el mediocampo del Barça. Es que en el último mercado el club, complicado económicamente, buscó sin éxito contratar un volante central, puesto huérfano desde la salida de Sergio Busquets. Después de que se cayera la llegada de Stefan Bajčetić, Flick no se desesperó y apostó por lo que había en la cantera. Así emergieron Marc Casadó (21 años), quien ha tenido mucho rodaje de titular, y Marc Bernal (17), que luego sufrió una inoportuna lesión.
Pero no son los únicos. En este nuevo blaugrana también destacan otros chicos como Pablo Torre (21), quien ha tenido nuevamente una chance tras un préstamo afuera, Pedri (21), asentado desde hace tiempo, Sergi Domínguez (19), y hasta los primos Guille y Toni Fernández, de apenas 16 años que son los preferidos de Flick al punto tal que ya los ha convocado para algunos compromisos. En defensa, también apareció la renovación como Héctor Fort (18) como opción a Jules Koundé en el lateral derecho y Alejandro Balde, de 21, en la izquierda.
Con estas pequeñas modificaciones en la plantilla, el Barcelona se ha vuelto uno de los equipos más sólidos de Europa. En la Liga lleva 40 goles a favor y solo 11 en contra en 12 compromisos, en los que cayó una vez. Además, en la temporada llegó a imponerse nueve veces por más de tres goles. La máxima paliza se la llevó Real Valladolid por 7-0, aunque en el medio hubo contundente triunfos ante Bayern Munich y Real Madrid, por 4-1 y 4-0, respectivamente. Así, el Blaugrana ha puesto a las juveniles otra vez en el centro de la escena.
