Diego Schwartzman se despidió del Roland Garros. El argentino cayó por 4-6, 6-4 y 7-6 (7) ante el francés Quentin Halys (187°) en 3 horas y 5 minutos de juego. De esta manera, el Peque disputó su último encuentro en el certamen y es por eso que se despidió del público francés entre lágrimas con un emotivo discurso.

«El último partido muestra cómo jugué toda mi carrera. Roland Garros es especial, aún enfrentando a un local me sentí como si hubiese estado en casa. Me siento bárbaro, hice lo que sé hacer, peleé mucho para ganar el partido, él mereció ganar. Felicitaciones a él y a todo el público francés», sentenció el argentino.

Luego, el semifinalista del certamen en 2020 y que supo llegar a los cuartos de final en 2018 y 2020, afirmó: «Tengo muchas batallas acá, nunca olvidaré ninguna de ellas, incluida esta. Aun perdiendo como dijo Domi Thiem, estar en la Lenglen es emocionante. Gracias a todos. No lo olvidaré jamás».

El saque muy certero por parte de Halys y los errores no forzados del Peque en el ‘super tiebreak’ decisivo fueron los que finalmente determinaron el resultado favorable para el francés. Esto se refleja en las estadísticas: 13 ‘aces’ para el local y solo 2 para el argentino.