Colón no mostró su mejor versión, pero con mucho esfuerzo encontró un gol agónico en los últimos minutos, venciendo 1-0 a Chaco For Ever en casa y manteniendo así el liderazgo en la zona B de la Primera Nacional. El gol decisivo fue obra de Javier Toledo, quien asumió la responsabilidad de un penal crucial y lo convirtió con seguridad.
Toledo ejecutó el penal como mandan los manuales en momentos de alta presión: fuerte y al centro. Este gol fue fundamental, especialmente después de la derrota en la jornada anterior contra Defensores de Belgrano, que amenazaba con convertirse en un bache de resultados.
Aunque el rendimiento del equipo no fue el mejor, lograron quedarse con los tres puntos en un partido complicado, empujados por su afición que llenó el estadio Brigadier López.
En esta fase, Javier Toledo se ha destacado con cuatro goles en cinco partidos, demostrando ser determinante. Su actuación contra Chaco For Ever subrayó su importancia y la necesidad de jugar con un delantero central.
El entrenador Iván Delfino había intentado varias veces utilizar a Braian Guille como falso 9, pero ahora que Toledo se ha consolidado como referencia en ataque y está marcando goles, es probable que siga confiando en él.