El mundo del fútbol tendrá la chance de poder despedirse de César Luis Menotti, este martes en el predio que la Asociación del Fútbol Argentino tiene en Ezeiza.
“El velatorio será mañana en el Microestadio de futsal y podrán concurrir exclusivamente familiares, amigos y personalidades destacadas del fútbol”, detalló la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) a través de un comunicado en su web oficial.
Por otra parte, el evento tendrá lugar durante la mañana y la primera parte de la tarde: “El horario para los que deseen acercarse a despedir al emblema del Fútbol Argentino y la Selección Nacional será de 10 a 16”.
Además el ente que controla el fútbol de nuestro país destacó que la ceremonia no será abierta a los medios de comunicación.
Nacido en Rosario, realizó sus primeros pasos como futbolista en Rosario Central. Luego, pasó por Racing y Boca en Argentina y posteriormente pasó a New York Generals de Estados Unidos.
Por último, cerró su carrera en Brasil vistiendo las camisetas de Santos y, por último, Juventus. En esta etapa, logró el Campeonato de Primera División con Boca en 1965 y el Campeonato Paulista con Santos en 1968.
Luego registró un extenso paso como entrenador tanto de clubes como de las selecciones de Argentina y México. Entre las instituciones que dirigió se encuentran Newell’s, Huracán, Boca, River, Independiente y Rosario Central de Argentina; Barcelona y Atlético Madrid de España; Peñarol de Uruguay; Sampdoria de Italia; y Puebla y Tecos de México.Como DT, fue campeón con Huracán (Primera División, 1973) y con Barcelona (Copa del Rey 1982/83, Copa de la Liga y Supercopa de España 1983).
De todas maneras, su título más recordado es con la Selección Argentina: Menotti condujo a la «Albiceleste» a conseguir la primera estrella en 1978 al conseguir la Copa del Mundo que se organizó en nuestro país. Además, obtuvo la Copa Mundial juvenil Sub-20 en 1979.
Hasta la actualidad, el «Flaco» se desempeñaba como Director de Selecciones Nacionales en la Asociación del Fútbol Argentino, período en el cual la «Albiceleste» obtuvo su tercer Mundial.