En Colón quedó sabor a poco por el empate como local ante Temperley 0-0. Sobre todo, porque tuvo chances para ganarlo de no ser por la gran tarea del arquero visitante, la figura. Pero también es cierto que no jugó del todo bien y por momentos la pasó mal.
En este sentido, el plantel y el cuerpo técnico es autocrítico y por eso el crecimiento es parejo. A parte, todavía se está muy lejos en el camino y estas situaciones sirven para corregir y mejorar. Así y todo, el Sabalero sigue siendo el mejor local de la Primera Nacional.
Pese a todo, quedó como aspecto positivo terminar con la valla invicta por segunda vez en fila. Esto habla a las claras también de lo sólido que se volvió el equipo. La última línea se muestra regular y el caso de Ezequiel Herrera es de lo más concreto.
Los números de Ezequiel Herrera en el último partido de Colón
Llegó desde San Lorenzo como una alternativa en el lateral y, ante la lesión de Julián Navas, al que Iván Delfino apuntaba como titular, aprovechó la chance y hoy está afianzado. Si bien por ahora luce más cuando se proyecta en ataque, elevó el nivel también en el retroceso.
Sus números destacados ante el Gasolero hablan por sí mismo. Le está faltando todavía ese pase o centro en los metros finales, porque cuando pasa lo hace con criterio.
En pocas palabras, ganó la pulseada en el lateral dentro de una competencia interna muy fuerte.
Fuente: El Litoral y colonstats_ en X