La partida de Franco Calderón de Unión estuvo marcada por varios desencuentros con la dirigencia, quienes intentaron retenerlo de diversas maneras. Sin embargo, el jugador chaqueño, quien quedó en libertad de acción, ya tenía decidido probar suerte en Chile.
Rápidamente, Universidad de Chile lo incorporó y lo integró al equipo, convirtiéndose en uno de los pilares defensivos más destacados del conjunto trasandino jornada tras jornada.
El pasado fin de semana, Calderón recibió el reconocimiento de la exigente hinchada de la U, que lo aplaudió por su destacada actuación en la victoria frente a O’Higgins.
«Me siento cada vez más cómodo y adaptado al fútbol chileno. Poco a poco voy conociéndome con mis compañeros y adaptándome a este estilo de juego», expresó el jugador nacido en Hermoso Campo.
Asimismo, agradeció el apoyo de los aficionados: «Para mí es muy gratificante. Es una motivación, aunque creo que la verdadera motivación la generamos nosotros, los jugadores. En Argentina, en los estadios siempre hay mucha gente, ya sea como local o visitante, así que también es bueno cuando estás de visita y el estadio está lleno. Pero en la U, no hay ningún estadio que se llene como este».