En medio del irregular momento que atraviesa Boca, que ayer sufrió la primera derrota del incipiente ciclo de Diego Martínez, el Consejo de Fútbol sigue proyectando a futuro con la idea de potenciar para junio al plantel que tanto le está costando este arranque de la Copa de la Liga. ¿Con qué futbolista? Uno de jerarquía internacional, de selección, Giorgian De Arrascaeta.
Además del de Lucas Torreira, el volante creativo del Flamengo es otro de los nombres principales que tienen en mente los dirigentes del Xeneize pensando en el mercado de pases de invierno. Y lo positivo, más allá de que no será sencillo ya que tiene contrato con el Mengao hasta fines de 2026, es que ya saben que existe una cierta simpatía de parte del jugador para con el elenco de la Ribera.
¿Cómo es esto? Hace apenas un par de meses hubo un guiño de De Arrascaeta, expresando implícitamente en redes sociales que no jugaría en River (se habló de un interés ante la salida de Nicolás de la Cruz justamente al conjunto carioca) por su cercanía emocional con Boca.
El Consejo de Fútbol suele tener la costumbre de planificar a largo plazo. No trae futbolistas por traer aunque necesite cubrir algunos sectores, sino que piensa en nombres importantes que puedan aportarle un plus de jerarquía al grupo a futuro. Y el de De Arrascaeta, junto con el de Torreira, que ya dijo que jugar en Boca «sería el sueño máximo», es uno de los que más les gusta de cara a la ventana de transferencias de mitad de año.
Por el momento puede decirse que simplemente «está en carpeta», pero si el camino se allanara de aquí en adelante es una opción factible que Boca apriete el acelerador e intente negociar para adquirir al talentoso charrúa.