Este jueves por la noche, Deportivo Riestra tuvo su debut en la Primera División por la fecha 1 de la Copa de la Liga en el empate polémico sin goles ante Instituto en Alta Córdoba.
La polémica de la tarde estuvo a los 20 del PT, cuando el árbitro Nicolás Ramírez no vio una mano clarísima de Nicolás Benegas en el área albirroja que fue un penalazo. El delantero de Riestra cruzó a bloquear el cabezazo de Gregorio Rodríguez y lo hizo atravesando el brazo, por lo que la pelota le pegó en zona sancionable, casi a la altura del codo. Es jugada muy rápida y difícil para el ojo del árbitro, pero es inexcusable para el VAR (Lucas Novelli), que con cuadro a cuadro puede determinar en qué parte le pegó la pelota al jugador de Riestra, y debió llamar al árbitro para que lo viera.
Riestra es el equipo mas mafioso del fútbol argentino. pic.twitter.com/BOvk89TmPF
— golesdeinstituto (@goles_instituto) January 26, 2024
Y después, para sumarle condimento, Gregorio Rodríguez le metió un planchazo al cuello de Jonathan Goitía. Fue sin mala leche, pero el árbitro no le tembló el pulso y le mostró la roja directa. Y ahí no terminó la cosa, porque el mismo referí cortó un ataque de Instituto y después se hizo el distraído con un córner clarito que tocó en la rodilla de Dematei. Un papelón inexcusable.
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