Unión tiene varios grifos abiertos, algunos más candentes que otros, pero al fin y al cabo, tarde o temprano, deberán tener una solución. El tema inhibiciones y dinero pendiente de cobro son dos aspectos más que importantes. La economía nacional cada día suma contratiempos y en esa dirección la entidad rojiblanca no puede salir de un pozo importante que repercute indudablemente en su accionar.
Muchos días del cierre de 2022 más el actual inicio de 2023 correspondieron a la novela «Santiago Mele». Un préstamo inicial inconcluso que puso al golero varios días muy lejos de la Avenida López y Planes. Pero con muchas reuniones y una nueva operación, el jugador de la Selección uruguaya siguió en Santa Fe.
En verdad los gerenciadores de Plaza Colonia suscribieron un nuevo vínculo, aunque ese reclamo que llegó a FIFA continuó por otros carriles. Hoy, a cinco meses de arrancar 2023, Roberto García volvió a dar declaraciones y reconoció que Unión todavía no pudo cumplir.
Esto tiene que ver con que los uruguayos también necesitan el ingreso de dinero, algo que no es posible por ese primer vínculo. En declaraciones al sitio Colonia Ya, el directivo admitió que «Mele firmó un contrato de renovación de préstamo con Unión de Santa Fe hasta el 31 de diciembre, supuestamente si a fin de junio le aparece una propuesta interesante, se va de ese equipo pero hay una cláusula que los argentinos pueden igualar la oferta y retenerlo».
Para luego, acotar: «Lo de la temporada 2023 ya lo hemos cobrado pero a pesar del reclamo en FIFA y la inhibición, Unión no nos abonó el préstamo de 2022 y le deben compromisos en dólares al propio Santiago Mele».
Con información de UNO Santa Fe