Mientras el plantel de Unión se encuentra de vacaciones, la dirigencia y cuerpo técnico no se toman descanso en la planificación de lo que será el 2024. Hasta el momento el Tatengue solamente abrochó el regreso de Lucas Gamba, y a su vez figuran dos sondeos de siempre: Cristian Tarragona y Enrique Triverio.
Pese a esto, el Tate cuenta con tres jugadores ofensivos que regresan de sus préstamos y que por lo que se pudo saber no tendrían lugar en el proyecto del Kily González. Se trata de Junior Marabel, Matías Gallegos y Franco Troyansky.
De los tres puntas, lo más llamativo es lo de Marabel, no sólo por la inversión prometida (500.000 dólares por el 60 por ciento de la ficha) o por la inhibición en FIFA (el club de origen, el humilde Deportivo Capiatá, reclama por esa vía), sino porque el jugador había pedido el famoso «cambio de aire» para recuperar confianza e incluso lo consiguió: ¡5 goles en 9 partidos y un par de asistencias!. Sorpresivamente, se desvinculó de General Caballero de Paraguay y empezó a pedir pista de aterrizaje en Santa Fe.
Otro de los retornos es el del canterano Gallegos, que tiene 26 años, 116 juegos profesionales y 15 goles. El punta, que debutó el 31 de marzo de 2018 e ingresó casualmente en reemplazo de Lucas Gamba (1-1 con San Martín de San Juan), viene de hacer experiencia en la segunda división de Chile. Con la camiseta del Barnechea jugó 26 cotejos y logró anotar 6 goles. La idea del club y de su representante es que vuelva a buscar minutos y goles en otro lado.
Finalmente, el caso más que especial de Troyansky, que más allá de su buen rendimiento con la camiseta de Unión (13 goles en 70 partidos con la rojiblanca), siempre fue cedido a préstamo e incluso en esta última cesión a Lanús se hizo una extensión de la misma. San Lorenzo de Almagro, Atlas de México y el granate marcaron su exilio. Con la casaca del grana jugó dos temporadas completas: 48 partidos y 6 goles. Sin embargo, ahora, debe volver. Luis Chebel, presidente de Lanús, fue claro ante la consulta de El Litoral: «Se vuelve a Unión». El agente FIFA del «Pocho», Silvio Villalba, explicó al diario de Santa Fe que «si bien desde lo administrativo es así, la idea es que Franco Troyansky juegue en otro lado y lo vamos a acordar con Unión».
A diferencia de Junior Osvaldo Marabel o del propio Matías Gallegos (ninguno de los dos tendría problemas en volver a ponerse la rojiblanca), la decisión de Franco Troyansky es buscar por otro lado, como ya ocurrió con San Lorenzo, Atlas y Lanús.
Más allá de estos tres casos, el «Kily» Cristian Alberto González pidió un punta por afuera y ya llegó el primero de los refuerzos para el 2024 que es Lucas Gamba, los caminos conducen a jugadores como Enrique «Kike» Triverio o Cristian Tarragona, como para darle un salto de calidad a los metros finales de la cancha, donde buscarán el crecimiento del canterano Dómina, la consolidación del «Toro» Morales y la recuperación total del experimentado Nicolás Orsini que pagó el costo alto de estar tanto tiempo parado en Boca.