Paraguay cerró una doble fecha de Eliminatorias destacándose por su carácter y sus aspiraciones de clasificar al Mundial 2026. Tras la victoria ante Argentina por 2-1, el empate 2-2 frente a Bolivia en la altura de El Alto fue celebrado como un resultado valioso por Gustavo Alfaro, quien elogió a sus jugadores calificándolos como «héroes malditos».
«Estos chicos son los ‘héroes malditos’ porque eran innombrables en Paraguay y hoy están reivindicando al país», expresó el entrenador, reconociendo el cambio de actitud del equipo y el compromiso mostrado en los dos encuentros.
Además de destacar el esfuerzo de sus dirigidos, Alfaro explicó la estrategia utilizada para enfrentar la altura: «Habíamos dividido este partido por etapas. Le dije a mis muchachos que, si íbamos perdiendo, no rifamos el partido. Sabíamos que Bolivia iba a salir con todo por necesidad, y cuando teníamos la pelota, teníamos la capacidad de hacerle daño».
El empate en condiciones adversas refuerza la confianza de Paraguay de cara al camino hacia el Mundial, mostrando un equipo con alma, estrategia y determinación.