Peñarol se fue al descanso venciendo por la cuenta mínima Botafogo y cada detalle sumaba en el afán por una hazaña difícil de conseguir en la semifinal de vuelta de la Copa Libertadores.

Sin embargo, el portero del elenco local «pisó el palito» y cedió dejando a su equipo con un jugador menos, en pleno entretiempo del compromiso.

Esto sucedió después que el uruguayo Washington Aguerre elevara la temperatura e su discusión con su colega brasileño John Victor.

Y luego de agredirlo ante los ojos del árbitro chileno Piero Maza, el juez nacional decidió sacarle la tarjeta roja directa.

Los hinchas del Manya no se demoraron en criticar la «actitud infantil» de su arquero, ya que condicionó el duelo mientras requerían cuatro goles para igualar la serie.

 

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