El equipo de Gerardo » Tata» Martino empató 3-3 con St. Louis City SC por la MLS.
El equipo del Tata está lejos de ser confiable. De mitad de cancha para adelante tiene a Lionel Messiy a Luis Suárez, pero es muy endeble a nivel defensivo.
Esto quedó a la vista nuevamente este sábado con el 3-3 ante Saint Louis City en Fort Lauderdale. Fue un empate con sabor a derrota. Porque Las Garzas sumaron un punto de seis como locales en las últimas dos jornadas y tienen a Cincinnati, a dos puntos con dos partidos menos, en la tabla de la Conferencia Este de la MLS.
Casi nada había pasado cuando Chris Durkin retrocedió hasta la medialuna para rescatar un centro bajo, giró y sacó un remate imparable para el 1-0 parcial cuando aún no se había cumplido el primer cuarto de hora. A partir de la ventaja, el equipo del sudafricano Bradley Carnell empezó a dominar. Pero nada es manejable cuando Messi está del otro lado.
A punto de cumplir 37 años y con la cabeza en la Copa América -el lunes se sumará a los entrenamientos de la Scaloneta en Miami y se podría perder hasta siete partidos de la MLS si Argentina llega a la final- el rosarino es imparable cuando se enchufa. Y todo cambió cuando tomó la pelota y encaró hacia la derecha, volvió, llegó hasta la puerta del área y descargó para Jordi Alba. El lateral recibió y detectó que Messi estaba libre y se la dejó en la zurda para que metiera uno de esos goles marca registrada. Fue el 12° de la temporada en 12 partidos. Y el 1-1 parcial.
El GOLAZO de Messi. pic.twitter.com/MmpZdm52cv
— Messismo (@Messismo10) June 2, 2024
Parecía que empezaba otro partido. De hecho, hubo otra combinación entre Alba y Messi, que remató con violencia al primer palo. Era gol. Era golazo. Pero Roman Bürki. con quien intercambió camisetas, tuvo otros planes y la sacó de un manotazo.
A falta de cinco minutos para el final de la etapa inicial, Inter volvió a mostrar sus flaquezas. Cremaschi, que había entrado por un lesionado Redondo, perdió la pelota en una salida y St. Louis City verticalizó. En tres toques llegó al área y el estadounidense Indiana Vassilev no dudó y remató cruzado. Fue gol sin festejos para el mediocampista con pasado en Inter Miami. Y otra vez el partido cuesta arriba para los de Martino. Sin embargo, en el descuento, Messi volvió a hacer de las suyas -llegará on fire a la Copa América-. Dejó a dos jugadores en el camino y abrió para Alba, que mandó un centro bajo que Luis Suárez, entrando por el segundo palo, capitalizó para el 2-2.
El ST fue de ida y vuelta hasta que Suárez metió la cabeza donde no debía en un córner y se hizo un gol en contra. Parecía que Inter lo perdía, hasta que Alba picó habilitado y, VAR mediante, volvió a firmar las tablas. Lo pudo ganar el dueño de casa, pero Weigandt demostró dos veces por qué es lateral derecho y no delantero.
Y ya no hubo tiempo para más. Inter Miami tiene dos caras. Y lo sufre demasiado.