La irresponsabilidad y desidia de Spahn lograron esto. Unión peleaba el descenso en el receso y armó un plantel que su propio DT calificó de «reserva mejorada». No tiene excusa para este desastre. De los que pelea abajo es el que menos sumó en el semestre. Depende de un milagro.
Que quede claro que Unión no está ahí por Dómina, Mosqueira, ni por jugadores que en primera, y en otros contextos, ya rindieron. Está ahí por un presidente para el que siempre, cuánto más barato sea el plantel, mejor. Aunque venda por millones. El resultado está a la vista.
En junio: «consenso para no vender y reforzarse». Se fueron Machuca y Gordillo. Los reemplazaron Dómina y Mosqueira, sus suplentes. Antes se había ido Esquivel. Lo reemplazó Zenón, que también estaba. El único titular que incorporó fue Morales: 20 años y 264′ como profesional.
Todo esto después de vender a González, Portillo, Nardoni, Esquivel y Machuca por un total de (según informó el propio club) 13.975.000 dólares. Con esas cifras y un equipo ya condenado (Arsenal), sólo quedaba un descenso para 27 equipos. A tres fechas del final, Unión está ahí.
Que quede claro que Unión no está ahí por Dómina, Mosqueira, ni por jugadores que en primera, y en otros contextos, ya rindieron. Está ahí por un presidente para el que siempre, cuánto más barato sea el plantel, mejor. Aunque venda por millones. El resultado está a la vista
